Cuando decides comprar una joya el acero inoxidable es una gran elección.

El acero es un metal que aunque lleve níquel sigue siendo hipoalergénico y en muy raras ocasiones provoca alguna reacción alérgica.
Las joyas de acero inoxidable sobre todo las de color dorado, pueden oscurecer al estar en contacto con la piel, al ducharte con ellas o al bañarte en playa o piscina, pero no te preocupes, coge un cepillo de cerda suave especial joyas, agua caliente, jabón y frótalas con mucho mimo, a continuación sécalas con un paño de algodón limpio o papel de cocina.

¡Volverás a lucir tu joya como el primer día!

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